CAPITULO 1
Se
estaba celebrando el nombramiento del Inquisidor Eisenhorn. Su guardia personal
estaba esperando fuera del palacio real de Tanith Magna.
Hlaine
Larkin estaba apostado en uno de los tejados cercanos, esperando a que
apareciera el nuevo Inquisidor, con su rifle láser de francotirador. Loco
Larkin era un hombre de mediana estatura, con el pelo negro muy corto. Tenía
una piel morena y un tatuaje azul con forma de pez encima de la ceja izquierda.
-
Todavía falta un rato - comunicó a través de su microtransmisor.
-
No tenemos ninguna prisa - le respondió el legendario soldado Solid Snake.
Snake
era un hombre alto. Llevaba puesto su traje de faena gris, igual que Larkin. Al
contrario que éste último, llevaba puesta la máscara. Iba armado con un rifle
de francotirador PSG 1-T y con una pistola Socom.
Dos
ninjas aguardaban la aparición de Gregor Eisenhorn, ocultos tras unas estatuas
de diez metros que representaban a los Inquisidores más famosos de ese planeta.
Las
grandes puertas se abrieron, y los ninjas armados con dos katanas cada uno se
abalanzaron hacia el nuevo Inquisidor para matarle. En menos de cinco segundo
se oyeron cuatro disparos. A Snake no le dio tiempo a disparar, pues el cuarto
disparo le reventó la cabeza.
La
ciudad estaba en estado de alerta. Un Inquisidor había muerto. En estado de
alerta, todos los ciudadanos están obligados a permanecer en sus casas. Se habían
soltado monstruos del zoo, y no habían sido las fuerzas de seguridad.
Miles
de millones de soldados se desplegaron por toda la ciudad con la orden de búsqueda
y captura de Hlaine Larkin.
CAPITULO 2
Larkin
se cubrió con su capa de camuflaje, y saltó desde un edificio de cuatro pisos y…
cayó en la escalera de emergencia. Era vieja y estaba oxidada. Fue bajando
hasta llegar al primer piso. Comprobó que su coche estuviera donde lo había
dejado. Saltó sobre la parte de atrás, y luego se puso al volante. Era un BMW
rojo y descapotable. El soldado puso su dedo pulgar en medio del volante.
-
Bienvenido L.L. - le saludó el coche, utilizando la abreviatura de Loco Larkin.
-
Llévame a un lugar seguro Jack - le contestó el francotirador al coche.
Aceleró
el coche y salió del callejón. Al llegar a la carretera se dio cuenta de que
muchos coches estaban parados y vacíos. Otros estaban aplastados. En ese
momento sonó el teléfono del coche.
-
Misión cumplida - informó L.L.
-
Has dado a conocer tu identidad L.L. Al arrancar el coche te han localizado -
le informó Pyros a través del teléfono -. Abre el maletero, coge las armas que
más te gusten y piérdeles la pista a las fuerzas armadas. Luego iremos a
buscarte.
-
Tened preparado mi dinero.
-
Vale. Ahora déjanos el trabajo a los mutantes. Corto.
Abrió
el maletero. Ya no estaría desarmado. Cogió dos cuchillos de plata típicos de
su planeta. En ese instante el coche explotó en mil pedazos.
-
Le hemos perdido - dijo Pyros.
-
Mejor. Así no tenemos que pagarle - le respondió el Rondador Nocturno.
Éste
último era como un demonio azul. Llevaba un colgante con la cruz de Cristo al
cuello. Era corpulento y medianamente alto. A su lado, Pyros parecía un niño.
Aunque era joven, había aprendido a manipular el fuego.
-
Tendremos que evitar esta guerra - dijo Pyros.
-
Va a ser difícil - le contestó su compañero.
-
Ese bastardo se ha cargado a un Inquisidor, y a su compañero. Debía haber
utilizado un PSG 1-T para dormirlo.
-
Recuerda que ese Inquisidor quería acabar con los mutantes, Pyros. La próxima
misión será mía. No fallaré.
-
El Elector de Tanith va a declarar la guerra a los mutantes ésta noche. Llévale
estos informes - le extendió unos papeles.
-
¿Participará el profesor Xavier? - preguntó ansioso el demonio azul.
-
Por supuesto. Sólo dejará en movimiento al Elector.
*Esta es una historia propia y original que utiliza personajes de sagas no relacionadas entre sí:
- Warhammer 40.000 - Eisenhorn.
- X-Men.
- Metal Gear Solid.
- Warhammer 40.000 - Los Fantasmas de Gaunt.
**Espero que les guste, a pesar de que la escribí hace años, siendo un crío de instituto.
